Los analistas coincidieron en que Massa salió mejor posicionado que Milei, pero plantearon dudas sobre cómo vieron los votantes el choque entre ambos candidatos y cómo afectará a los indecisos.
¿Quién ganó el último debate presidencial? ¿Qué impacto puede tener en el balotaje? ¿Pudo cambiar la opinión de los indecisos lo que se vio anoche? Son preguntas inevitables y obligatorias que cinco analistas políticos y de opinión pública trataron de responder. Hubo una coincidencia generalizada de que Sergio Massa terminó esta noche mejor posicionado que Javier Milei, pero todos plantearon sus dudas sobre el resultado que podría tener entre los electores y, si efectivamente, lo que ocurrió en la Facultad de Derecho de la UBA influyó de algún modo entre los que todavía no saben qué hacer el domingo que viene.
Para abordar estos interrogantes, Infobae entrevistó después de concluido el debate -que tuvo un pico de rating de más de 48 puntos- a Enrique Zuleta Puceiro (OPSM), a Mariel Fornoni (Management & Fit), Augusto Reina(PulsAr-UBA), Lucas Romero (Synopsis) y el politólogo y consultor Roberto Starke. En el diálogo con ellos se buscaron detectar algunas certezas y sumergirse en el misterio de entender cómo piensa un electorado que vive entre la incertidumbre, el miedo y dosis cada vez más reducidas de esperanza.
El consenso -más allá de la aparente superioridad en el choque de argumentos del candidato de Unión por la Patria por sobre el de La Libertad Avanza- fue que todavía hay un cono de sombra sobre el efectivo impacto que tendrá el tercer y último debate, específicamente en una porción decisiva del electorado, que está entre el 15% y el 20%, que votó otro candidato que quedó en el camino, no decidió a quién votar, está en duda de ir o no a las urnas, o puede llegar a modificar su preferencia hasta en el mismo cuarto oscuro.
La opinión de Mariel Fornoni
“En términos generales fue un debate poco lúcido, de discusiones bastante básicas, donde Sergio Massa se mostró como el candidato más sólido, porque en general lideró y marcó agenda, sobre todo en la primera parte del debate, que era la más difícil, porque eran los temas económicos, que son el expertise de Javier Milei”, aseguró la directora de M&F.
Destacó que “era Sergio Massa el que tenía que dar explicaciones de la realidad que está viviendo la Argentina hoy y, sorprendentemente, el candidato oficialista fue a la ofensiva, marcó agenda y Milei se tuvo que limitar a responder las preguntas que le hacían”.
“En la segunda parte el debate se emparejó, Milei se soltó un poco más, pero evidentemente pesó más la preparación y la experiencia de Massa superior a la de Milei ¿Qué es lo que tenía que conseguir el debate? Captar no a ese 70% de votantes que está bastante definidos, porque son los que votaron a uno u otro en octubre, sino a votantes de Patricia Bullrich o de Juan Schiaretti que aún no están definidos o que podrían cambiar su voto. También a aquellos que estaban decididos a votar en blanco, o los que todavía no sabían si votar o no”, consideró.El consenso es que Massa quedó mejor posicionado en el debate, pero la duda está en cómo tomó el electorado lo que ocurrió en la Facultad de Derecho
“No sé qué es lo que habrá podido tener más efecto, porque por un lado también se mostró un Massa más sólido, pero se mostró un Milei que si bien no expuso tanta preparación, siguió sosteniendo sus banderas en términos de algunos temas puntuales como la dolarización y la eliminación del Banco Central”, agregó.
“Tampoco Milei asustó con comportamientos autoritarios, o algún tipo de inestabilidad emocional, que era lo que siempre se pretendió mostrar como su talón de Aquiles. Los dos cumplieron su cometido: Massa no quedó tan en evidencia en relación a dar explicaciones sobre el Gobierno y sobre su rol como ministro de Economía. Y Milei tampoco quedó expuesto en términos de su vulnerabilidad en términos de la emocionalidad”, consideró Fornoni.
La mirada de Zuleta Puceiro
“El debate siguió una lógica muy diferente a lo que se esperaba. Lejos de encontrarnos frente a una confrontación entre visiones de la política o, en todo caso, expresiones de la antinomia que se ha planteado en la Argentina, vimos más bien un debate entre dos personas: yo, vos, yo, vos, que se centró muchísimo en aspectos personales y de chicanas”, expresó Zuleta Puceiro
El titular de OPSM continuó: “Massa tuvo una evidente superioridad, propia de un mejor entrenamiento y el ADN de la política, y que le permitió poder aprovechar mejor los minutos. En la parte técnica, Massa es muy superior, mientras que Milei sorprendió por la falta de frescura y aceptó ese riesgo. Lo aceptó al responder a todo un interrogatorio que le iba planteando su rival. Es muy viejo en los manuales de campaña y en los manuales de debate: cuando un candidato llega a poner al otro en la posición de acusado”.
Zuleta Puceiro destacó que “Milei, que tiene la carga de proponer, de transformar y de abrir un horizonte nuevo, se vio obligado a un interrogatorio en gran parte bastante forzado, al se emplazado a responder por sí o por no. El haber aceptado eso le dio la iniciativa a Massa. Y en este momento de las campañas, quien tiene la iniciativa y fija la agenda tiene una ventaja muy importante. Creo que desde el punto de vista técnico del debate, la verdad de las cosas es que Massa fue muy superior”.
“Lo que me pregunto es si lo que ha visto la gente, desde afuera, es otra cosa y no ve más bien el político suficiente, canchero, capaz, frente al político un poco más rudimentario, pero más sincero. Si acaso confundido frente a una estrategia que no domina, como quien no domina las artes de los debates televisivos”, consideró.
El estudio de Augusto Reina
“Lo que vimos en general entre los votantes de Juntos por el Cambio y los indecisos es que hubo mucho desconcierto y desorientación respecto a qué hacer con su voto. Lejos de agregarle coordenadas y tirarle señales para que definan su posición, el debate los puso en una posición incluso más incómoda que los que estaban antes”, explicó el investigador.
PulsAR, de la UBA, es un centro de estudios que en los últimos debates analizó cómo impactó en los diversos electores esos eventos y su impacto potencial al momento de la elección. En esta oportunidad, Reina advirtió que en el procesamiento de los primeros datos después de terminado el debate es que habría tenido éxito la estrategia de Massa de “exponer un poco más a Milei y sus ideas”, que se evidenció en “cierta reticencia a cruzar el río que implica votar” al candidato libertario.
“Entre los que estaban en duda, ahora se inclinan más a votar en blanco que ir a votar a Milei o incluso a Massa. No es que se definieron por un lado, por el otro. Desde el punto de vista de la estrategia de posicionamiento de cada uno, me queda claro qué es lo que quiso ir a hacer cada uno. Massa intentó que el foco, el spotlight, esté sobre Milei y exponerlo ahí, que explique todas sus posiciones públicas y sobre todo, lo hizo en el bloque económico, que es donde más le complica hablar de esos temas”, aseguró.
Augusto Reina indicó que “en los siguientes bloques, ya en la dinámica más de interacción entre ellos, se hizo más balanceada, pero ya habiendo cumplido el cometido que intentó Massa en el primer bloque, que es no hablar de los 12 puntos de inflación y la crisis económica que hay en Argentina y si no centralmente, que Javier Milei vaya a dar explicaciones”.