Este encuentro no solo representó una oportunidad para disfrutar de las decoraciones navideñas de la ciudad de Capioví, sino también para fortalecer los lazos de amistad y apoyo mutuo que caracterizan a este grupo.
El compañerismo se convirtió en el eje central de cada actividad, con momentos de risas compartidas, gestos de cuidado y una energía que demuestra que la edad nunca es un límite para disfrutar y vivir plenamente en comunidad.