Los mandatarios provinciales exigen fondos y faltaron el acto por el 9 de Julio; “Jodan todo lo que quieran, los espero el 11 de diciembre”, dijo el Presidente; advirtió a los legisladores que lo desafían con leyes clav
El presidente Javier Milei arremetió este miércoles contra los gobernadores, que se unificaron para pedir giros de fondos a las provincias y decidieron no participar en la celebración central por el Día de la Independencia. A todos los mandatarios, tanto a los que lo acompañaron en este tiempo de gestión como a los que no, los acusó de querer “destruir” a su gobierno y “romper todo”, por motivos electorales y de poder.
“Quieren destruir al gobierno nacional, todos”, dijo el Presidente sobre los gobernadores. “La intención de ellos es romper todo porque si La Libertad Avanza se convierte en ‘La Libertad Arrasa’, tienen un problema, se tienen que jubilar. No les importan los argentinos, están dispuestos a hacerlos sufrir con tal de mantener el poder”, sostuvo en Radio El Observador.
Además, planteó que hubo un aumento de la recaudación de entre 7% y 8%, que beneficia a las administraciones locales, por el contrario de lo que aseguran los mandatarios provinciales, que reclaman que están cortados los giros de la Casa Rosada. “Están recibiendo un montón de recursos, partieron de una situación de equilibrio, están recibiendo más recursos. No corresponde [lo que piden], están desbocados”, marcó y los acusó de integrar “el partido del Estado”.
En eso, calculó que el paquete de iniciativas que mandaron los gobernadores al Congreso junto a otras de la oposición -como el aumento de jubilaciones o el financiamiento en salud- representa 2,5% del PBI. “Está claro que están buscando destruir”, insistió Milei.
Sin embargo, dijo que si no logra mantener el veto a esas iniciativas, no habrá un cimbronazo en la economía argentina por la estabilidad que le adjudicó al plan económico y por el buen desempeño de su partido que espera para las elecciones. “No hay fundamentos sólidos para estar espantados. Primero por la solidez de la macro“, expresó.
Después, afirmó que sería importante que el Senado no tratara el “paquetazo” que mandaron los gobernadores. “Veremos qué hace [Victoria Villarruel]. Esperemos que defienda los porotos como corresponde, los pingos se ven en la cancha”, dijo, para sumar presión sobre su vice, con la que tiene la relación cortada.
En caso de que avance, Milei dejó entrever que será importante ver qué hacen los senadores hasta ahora aliados a la Casa Rosada. “Habría que ver si la oposición que tiene cierta afinidad con el Gobierno está dispuesta a avalar un programa populista dedicado a romper el equilibrio macroeconómico para volver al poder”, comentó, aunque en seguida destacó: “Voy a demostrar acá que no va a pasar nada. Todo lo que puedan hacer de daño va a tener un impacto transitorio porque después de que los aplastemos en las elecciones vuelvo a poner las cuentas en orden a la brevedad. Va a tener un impacto negativo transitorio pero la política de equilibrio fiscal es permanente. Jodan todo lo que quieran, los espero el 11 de diciembre. Va a ser un efecto negativo transitorio. Estamos absolutamente tranquilos de que no va a pasar nada“.
Siempre bajo esa postura, aclaró que si le rechazan el veto, va a judicializar la situación acelerada por los “hijos de puta que quieren romper el país”.
“Si querían hacer una maldad, ya es tarde. No van a poder causar daño, aún en el peor de los mundos”, dijo, confiado, y en un intento de mostrar optimismo cuando el panorama para su Gobierno no está tan aceitado como en otros momentos de mejor negociación para administrar el Congreso.
“Estamos cara a cara con el peronismo en la Provincia”
Esa misma tesitura mostró con respecto a las elecciones legislativas que se vienen. “Vamos a hacer una elección fuerte, por lo menos vamos a sacar 40. El peronismo va a estar por lo menos 10 puntos abajo, si no más”, calculó, a nivel nacional.
A nivel bonaerense, el Presidente ratificó que el acuerdo con Pro “está cerrado”, en la previa de una conferencia conjunta que habrá esta tarde para mostrar la alianza, y señaló sobre la oposición: “El programa tiene consenso en los sectores vulnerables, por eso está tan asustado el peronismo, estamos disputándole cara a cara en la provincia de Buenos Aires”.
Respuestas sobre las valijas de Arrieta
Por otro lado, el Presidente abordó el tema más espinoso para el Gobierno en este momento: la llegada a la Argentina desde Miami de Laura Belén Arrieta con valijas sin declarar, que investiga la Justicia, en un avión privado de Leonardo Scatturice, un empresario que tiene nexos con el Gobierno y un pasado en el ámbito de la inteligencia.
Milei buscó despegarse tanto de Arrieta como de Scatturice y además negó cualquier irregularidad de parte de su gestión.
“En principio, que yo tenga una foto con una determinada persona no me hace amigo. Tengo una foto con una chica [Arrieta] que fue en CPAC. Es una foto donde hay como diez personas y está esa chica. Que tengas una foto con alguien no te hace amigo, que la política quiera conjeturar cosas… No es mi amiga, [Scatturice] tampoco. Conozco el nombre. No sé ni quién es si me pasa por acá, conozco el nombre. Serían más honestos si mostraran la foto completa, cuando se quiere mentir se hacen estas cosas. Arrancás con una situación deshonesta”, dijo.
Arrieta fue una de las personas que más influencia tuvo en el armado de la CPAC en la Argentina, evento en el que participó la plana mayor del gobierno libertario, mientras que Scatturice es uno de los nexos principales de la Casa Rosada con la gestión Trump.
Asimismo, Milei volvió sobre los dichos del titular de ARCA, Juan Pazo, sobre una supuesta discrecionalidad en los controles que se hacen a los vuelos privados en Aeroparque. “Segundo punto, lo explicó Pazo, el titular de ARCA, el criterio es… Vos sos inocente hasta que se prueba lo contrario. En rigor, los controles en Aduana son discrecionales. Y arbitrarios. Los determina la gente de Aduana“, aseguró.
“A ver, los vuelos privados, o sea… Digo… Son controlados y tienen la misma lógica de control, pero, o sea, no es ningún problema, es súper convencional. Tiene que ver con los criterios que maneja Aduana. Es una cuestión propia de Aduana la discrecionalidad con la que hace eso», añadió, para poner el foco en los oficiales que revisan, y descartó cualquier orden de arriba sobre el equipaje del avión. “Es absolutamente discrecional y arbitrario del personal de Aduana cuando decide qué pasa o no. No tiene nada de irregular que pasen valijas, ex ante la gente es inocente hasta que se demuestre lo contrario», planteó.
Y como otro factor determinante se basó en el origen del vuelo. “El equipaje venía de Estados Unidos, te controlan todo, con lo cual era un… Lo que venía era algo que tenía ya un control previo, serio. No podría haber salido de Estados Unidos algo así [drogas, dinero]“, afirmó, en un pasaje incómodo de la entrevista.
Dijo también que el Gobierno no maneja las cámaras del aeropuerto, pese a que ese control lo hace la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), que depende de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

“Ahora nosotros… La imagen es súper marketinera, pero en un aeropuerto hay gente que lleva valijas, es algo normal“, dijo y aseguró sobre el equipaje: ”No son diez valijas, son diez bultos. Dos correspondían a la chica [Arrieta], dos a la tripulación, dos a otra persona y había cuatro bolsas de compras», desglosó.
Y tras ello evitó ahondar sobre el teléfono que Arrieta le habría dado a una persona del control del aeropuerto, algo que consta en la causa judicial en base a la declaración de un testigo. “A ver… yo sigo con esto… A pesar de esto, ¿qué hicimos? No hay ninguna irregularidad. Buscar una irregularidad es un disparate. A pesar de eso, hicimos un sumario e iniciamos una causa penal. Nosotros no nos podemos dar ni un milímetro de ventaja. A cualquier cosa le caemos encima, estamos tranquilos con lo que hacemos“, sostuvo y planteó, sobre las incongruencias en base a desde qué aeropuerto de Miami partió el vuelo privado: ”¿No te van a controlar el equipaje? Si hay algo raro, automáticamente te agarran de las orejas. O sea…“.