Fue hallado en un baldío del barrio Carmen Luisa, en Reconquista. Hay un demorado e investigan si participaron más personas en el crimen.
La Policía de Santa Fe confirmó el hallazgo del cuerpo de Rocío Magalí Vera, la chica de 14 años que había desaparecido el domingo en Reconquista. Fue encontrado en un baldío del barrio Carmen Luisa de esa ciudad. El fiscal informó que presentaba signos de violencia.
Según fuentes del caso, el cadáver fue hallado pasadas las 18 por un hermano de la víctima, que llamó a la Policía. El cuerpo de la adolescente estaba sin ropa y con algunas prendas tapando su cabeza.
Al respecto, el fiscal de la causa Alejandro Rodríguez explicó que se trasladaron al lugar el Grupo Técnico Criminalístico, la médica policial, personal de la policía de investigaciones, de la fiscalía y de la comisaría Segunda.
Respecto a la causa de la muerte, sostuvo: «El cuerpo tiene signos de haber padecido la acción de un tercero, es decir, evidentemente se está en presencia de un hecho doloso y que estamos investigando».
No obstante, añadió que la autopsia se ordenará este martes y que entonces se conocerá información más precisa en ese sentido. «Hoy no estoy en condiciones de aventurar un abuso o lo que fuere, más allá de alguna impresión que puede tener», sentenció.
En relación con los posibles autores del crimen, sostuvo: «Yo me reuní con los familiares, les dijimos esto. Se hizo presente la jueza de Menores Griselda Delbón, porque teníamos algunas pistas de la participación de personas mayores y menores. En este momento hay una persona, menor de edad, demorada. Presumimos con alto grado de probabilidad que puede haber otros implicados».
La desaparición de Rocío
Según consignó la agencia NA, Nilda Valenzuela, la madre de Rocío, denunció la desaparición de la adolescente este domingo. Entonces, la comisaria 2° de Reconquista emitió un pedido de paradero por «fuga de hogar».
La mujer dijo que la chica vivía en barrio La Loma, al sur de Reconquista, y que durante la mañana de ese día «su novio la llevó a la casa de su padre, que vive en Calle 10», porque quería pasar el día con él.
Después, Valenzuela recordó que «la llamó el padre de su hija para decirle que Rocío se fue con E. G., de unos 30 años, a una casa en el barrio Carmen Luisa donde se juntan siempre». Sin embargo, cuando fue a buscarla ya no estaba más en el lugar, y «un joven le contó que no sabía a dónde había ido».
