Alexis Ramos
Un devastador incendio consumió por completo una vivienda en el barrio 508 Viviendas de Itaembé Guazú este domingo por la mañana. La familia que habitaba la casa quedó en la calle y solicita ayuda para sobrellevar esta trágica situación.
Mario Pereira, propietario de la vivienda siniestrada, relató que el fuego se desató entre las 10:30 y las 11:00 de la mañana, pocos minutos después de que él y su familia salieran del hogar. “Nosotros acabábamos de salir y a los pocos minutos los vecinos me avisan que se incendió la vivienda. Cuando llegamos, ya no había nada que hacer”, lamentó.
Las llamas no solo destruyeron por completo su hogar, sino que también afectaron a viviendas vecinas. “Ocasionó bastante daño también, gracias a Dios no fue en su totalidad, pero el fuego llegó a otras casas”, detalló.
Según el informe de los bomberos, el incendio se originó a causa de un cortocircuito, al igual que otro siniestro que Pereira sufrió hace apenas un año y dos meses. “No fue culpa nuestra porque el informe del peritaje de los bomberos dice que fue un corte de circuito, como también fue la primera vez. Escapa de lo que nosotros podemos hacer”, expresó con resignación.
La familia está compuesta por Mario, su esposa y tres niños: un nene de nueve años con discapacidad, otro de ocho y una pequeña de tres. La falta de un lugar donde quedarse hizo que la primera noche tras la tragedia fuera extremadamente difícil. “Tuvimos que pasar la noche bajo el árbol, como podrán ver, porque no tenemos un lugar para ir”, contó con angustia.
Además de perder su hogar, Pereira también se quedó sin la posibilidad de generar ingresos, ya que todas sus herramientas de trabajo se consumieron en el incendio. «Para mí lo primordial sería recuperar las herramientas de trabajo para poder salir a trabajar. Sin trabajo, no puedo salir adelante», explicó. Se dedica a la albañilería y la plomería, pero ahora, sin sus herramientas, se ve imposibilitado de retomar sus actividades. “Con lo poco que puedo hacer mantengo a mi familia, les doy de comer a mis hijos, pago los servicios de luz y agua, pero ahora en esta situación se complica muchísimo más”, agregó.
El incendio también dejó sin material escolar a sus hijos, lo que impidió que pudieran asistir a clases. “No tengo ni un cuaderno, ni un lápiz, absolutamente nada para mandarlos a la escuela”, lamentó. La imposibilidad de acceder a la educación preocupa a la familia, ya que recién habían realizado gastos para preparar a los niños para el nuevo ciclo escolar y lo perdieron todo.
Hasta el momento, no han recibido respuesta de las autoridades municipales ni provinciales. «Me están diciendo que todavía no tienen ninguna solución y que tengo que esperar a ver qué resuelven», comentó Pereira. Frente a la incertidumbre, la familia apela a la solidaridad de la comunidad. “Agradezco a toda la gente que ya se solidarizó conmigo y a los que quieran ayudar. Cualquier colaboración, ya sea herramientas, muebles, ropa o alimentos, será bienvenida”, señaló.
Aquellos que deseen ayudar pueden acercarse a la calle Cocu 5028, cerca de Cocú y Los Lapachos, o comunicarse al 3765-29-29-75.