El completo hermetismo con el que se maneja la información sobre el estado de salud de Carlos Salvador Bilardo genera ingratas sorpresas.
Es que, luego de su última aparición con parte del equipo campeón del mundo en México 1986, a mediados de abril, nada más se supo sobre el Narigón.
Sin embargo, en la víspera, se conoció una novedad que entristece a todos los amantes del deporte: el Doctor se encuentra internado nuevamente por el síndrome de Hakim-Adams.
El Instituto Argentino del Diagnóstico y Tratamiento confirmó que Bilardo ingresó el pasado 2 de mayo y está en una sala común y despierto. Pero su estado se deterioro debido a que sufrió un deterioro motriz y sensorial.
Las principales características de este síndrome son trastornos de la marcha, dificultad para comenzar a caminar, debilidad en las piernas y caídas sin motivo aparente. Algunos síntomas asociados con la progresión de la enfermedad son demencia, cambios constantes de humor, apatía, aislamiento, problemas de atención e incontinencia urinaria.