Desde hace más de diez días, los viajeros que utilizan el tren internacional entre Posadas y Encarnación se enfrentan a una interrupción inesperada en el servicio. La controversia comenzó el viernes 10 de noviembre cuando, desde el lado paraguayo, se rechazaron los pesos argentinos como forma de pago para el retorno de los pasajeros hacia Posadas.
Esta negativa desencadenó un conflicto considerable, dejando a muchos viajeros varados al otro lado de la frontera al no disponer de la moneda guaraní requerida para el servicio. El problema se agravó el lunes 13 de noviembre cuando las empresas responsables del tren, Itapua S.A. y Trenes Argentinos, decidieron suspender completamente el servicio, que hasta la fecha no ha sido restablecido.
Además de los problemas cambiarios, se han reportado discrepancias en las tarifas. Mientras el viaje de Posadas a Encarnación en tren cuesta 580 pesos argentinos, el regreso desde Encarnación a Posadas se cotizaba en 18.000 guaraníes, equivalentes a unos 2.200 pesos argentinos, triplicando el precio original del servicio.
A pesar de que el propietario del tren, Casimiro, no está directamente involucrado en el conflicto, la falta de acuerdo entre las concesionarias ha dejado a los usuarios sin una solución inmediata. Mientras tanto, el servicio de autobús internacional continúa funcionando sin problemas en lo que respecta al cambio, con un costo de 700 pesos argentinos para el viaje de ida y otros 700 pesos para el regreso.
Además, desde octubre se llevan a cabo trabajos de mantenimiento en las vías del tren, interrumpiendo el servicio dos días a la semana. Esta combinación de factores ha dejado a los usuarios del Tren Internacional sin una alternativa eficiente para cruzar la frontera.
Aunque se especula con una posible reanudación del servicio el viernes, la incertidumbre persiste, impactando a quienes optan por el tren debido a su rapidez para cruzar el puente internacional San Roque González de Santa Cruz.