Tras las frustradas reuniones ante el ministerio de Trabjo, el gremio metalúrgico acentúa el tono del reclamo y arranca este martes con paros. La política incluída la campaña electoral atraviesa el conflicto, hubo un fuerte debate del gremio en Córdoba para definir la medida.
La revisión paritaria de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) llega esta semana a laestación de conflicto con los tres paros que se anunciaron desde el encuentro regional de Córdoba. La secuencia de huelgas establecida arranca este martes, de 10 a 21, continua con 48 horas para jueves y viernes, completará 72 horas sin actividad la semana que inicia el lunes 24.
La UOM, liderada por Abel Furlán, reclama 10% para equilibrar el acuerdo anterior, 30% para el tramo julio/septiembre y un bono de por el «Día del Metalúrgico» por $60.000. La contraoferta empresaria llegó en la última audiencia del jueves y fue del 30%. A saber: 14% para julio, 8% en agosto y 8% para septiembre. «No a lugar», para el 10% de reparación para el acuerdo anterior y el bono que el gremio reclama como suma fija complementaria al pacto.
Siempre referencial, esta mesa salarial está atravesada por razones políticas gravitantes, de concepto y en tiempos electorales. La conducción sindical desde su asunción promovió recuperar salarios, y cambió la tónica de negociación. Además se propuso amplificar el escenario de sus debates, provincia por provincia y de hecho el encuentro reciente de Córdoba lo verificó. «Nos apuntan como afines al kirchnerismo, pero acá están jugando la UIA y las cámaras del sector, encolumnadas en su adhesión a Horacio Rodríguez Larreta», coincidieron fuentes de la UOM.
En el ajedrez para la previa del primer capítulo del plan de lucha, estiman y esperan que el Gobierno no les aplique la conciliación obligatoria para frenar el paro.
Por escrito, con puntos y señales
El comunicado que oficializó el comienzo del plan de lucha señala que «en un proceso inflacionario que nos obliga a la negociación paritaria permanente y luego de 5 encuentros para el acuerdo de julio/septiembre, prevalece la avaricia, la insensibilidad y el egoísmo del sector empresarial». A esos trazos emitidos desde Córdoba, se suma que la actual conducción sindical desde su asunción en 2022 promovió recuperar salarios, y cambió la tónica de negociación. Además se propuso amplificar el escenario de sus debates, provincia por provincia y de hecho el encuentro reciente en la docta lo verificó.
No sólo por los dichos de Furlán y el anfitrión Rubén Urbano, secretario de Prensa de la UOM y referente de la CGT cordobesa. Sino por el tenor del debate que antecedió al anuncio del plan de lucha. Entre voces de alto voltaje, el titular metalúrgico de Quilmes, Berazategui y Florencio Varela Adrián Pérez destacó al secretariado nacional e hizo suya la consideración de que “peleamos por la dignidad de todos los trabajadores porque los sueldos de todas las actividades están en baja”.
Y la traza de que “toda paritaria es política” con versión extendida a la definición de los precios que marcó la ministra de Trabajo a Kelly Olmos, está presente en el análisis de la UOM. La conducción sindical desde su asunción promovió recuperar salarios, y cambió la tónica de negociación. Además se propuso amplificar el escenario de sus debates, provincia por provincia y de hecho el encuentro reciente de Córdoba lo verificó.
Las cámaras Adimra, AFAC (autopartistas), Camima (pymes industriales), Afarte(electrónicas de Tierra del Fuego), Caiama (aluminio) y Fedehogar (electrodomésticos) defienden su propuesta y aseguran que «el sindicato es el que está empujando al conflicto».
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