El anuncio llega tras el acuerdo alcanzado por ambos países que estableció una suba de la tarifa que el vecino país pagará hasta 2026 por la energía de la hidroeléctrica de Itaipú
La Administración Nacional de Electricidad (Ande) de Paraguay anunció que alista la exportación de 100 megavatios al mercado brasileño, después del acuerdo alcanzado por ambos países que estableció en los 19,28 dólares por kilovatio al mes la tarifa que el vecino país pagará hasta 2026 por la energía de la hidroeléctrica de Itaipú.
“En breve, ya vamos a lanzar la exportación de 100 megavatios. Inicialmente, como un ejercicio para poder entrar a partir de ahora en el mercado eléctrico brasileño y después ir preparando una licitación más grande para poder colocar lo máximo posible”, declaró el presidente de la Ande, Félix Sosa, en una entrevista con la portavoz del Gobierno, Paula Carro.
El funcionario explicó que la intención es entrar “directamente en el mercado” brasileño y no a través del mecanismo actual de cesión de la energía no consumida por Paraguay, la cual llega al vecino país a través de un intermediario.
Sosa indicó que desde la firma, la semana pasada, del acuerdo con Brasil sobre la tarifa, empezaron a trabajar en este objetivo. El titular de la estatal consideró que se trata de un “camino más” para colocar la energía no utilizada por Paraguay.
“Puede ser en algún momento positivo o no tanto, pero sí vamos a tener opción de ceder, seguir cediendo, o exportar directamente al mercado eléctrico brasileño”, agregó Sosa, para quien también se abre la posibilidad de que lleguen inversionistas al país interesados en la generación de energía eléctrica.
Suba de precio de energía eléctrica y su impacto económico
El acuerdo oficializado por el presidente de Paraguay, Santiago Peña, le permitirá un ingreso anual de 280 millones de dólares en ingresos por regalías, 650 millones para inversión social, 265 millones por compensación de energía y 53 millones en utilidades de capital y otros.
Peña también aseguró que la elevación de la tarifa que los brasileños pagarán por la energía de la hidroeléctrica de Itaipú en los próximos tres años, abre una nueva etapa en la relación con Brasil.
“Creemos que es un acuerdo justo para Paraguay. Nosotros no creemos que Paraguay le haya quitado nada a Brasil, creo que esta es una victoria para ambos países y que nos permite mirar un futuro de manera común, juntos y con mucho optimismo”, dijo el mandatario.El presidente de Paraguay, Santiago Peña, aseguró que la elevación de la tarifa abre una nueva etapa en la relación con Brasil. EFE/ Mariscal
El tratado de Itaipú, firmado por Brasil y Paraguay en 1973, establece en su Anexo C que cada país tiene derecho al 50% de la energía generada por la represa compartida, pero si una de las partes no utiliza toda su cuota, debe vender el excedente al otro socio a precios preferenciales.
Cumplidos 50 años del tratado, ambos países han iniciado conversaciones para la revisión de ese anexo, que define las bases financieras y la prestación de servicios de electricidad de la represa.
El jefe de Estado precisó que el aumento de la tarifa sumó un adicional al presupuesto social que tiene Itaipú Binacional de cerca de 200 millones de dólares.
Una parte de los recursos adicionales se destinarán a fortalecer la capacidad de distribución y transmisión eléctrica que consta en un plan de inversión de la Administración Nacional de Electricidad de Paraguay (Ande).El acuerdo le permitirá un ingreso anual de 280 millones de dólares en ingresos por regalías a Paraguay.
“Hay diferentes proyecciones que hablan que la Ande podría consumir el 100% de (energía de) Itaipú y Yacyretá (la represa compartida con Argentina) para 2032, 2035. Nuestro plan, nuestro deseo es acelerar ese proceso”, adelantó el mandatario, que precisó que el objetivo es que Paraguay sea consumidor de esa energía a través de la atracción de la industria privada.
En esa misma línea, Peña señaló que Paraguay alista proyectos de nuevas fuentes de generación de energía.
En ellos mencionó el proyecto de gasoducto que pretende unir la producción de la formación de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, en el suroeste de Argentina, con Brasil, lo que “abre una oportunidad enorme” al país para avanzar en mayores prospecciones para hallar gas en el Chaco paraguayo y luego usar esa infraestructura.