La reunión se llevó adelante por pedido de los vecinos, la convocatoria en la oportunidad es a la policía comunitaria, foro de seguridad y defensoría del pueblo.
La inseguridad, no es una sensación, en algunos casos es profesado por familias que mantienen en vilo a todos los vecinos, dado que tienen un raid delictivo que viene de años donde el principal reclamo apunta fundamentalmente a la justicia por la falta de acción. En este sentido, los reclamos, recaen específicamente sobre los uniformados, sin embargo, la reunión permitió que se discutieran los roles a la hora del pedido de intervención.
Primeramente, los vecinos expresan poca reacción por parte de la policía y segundo la conformidad de los vecinos que no acuden a ratificar las denuncias dejando sin posibilidad de acción a la justicia.
«En este sentido me parecen muy positivas ambas reuniones, dado que los vecinos expresan sus inquietudes y desacuerdos, permitiendo esto, definir los caminos a seguir, asumiendo nuevamente nuevos compromisos para erradicar la delincuencia y el vandalismo del barrio». Contó el defensor Penayo.
