Para obtener el certificado de navegabilidad, el auto volador, equipado con un motor 1.6 BMW y con la capacidad de transformarse en vehículo o avión en menos de tres minutos, debió realizar 70 horas de ensayos en vuelo y más de 200 despegues y aterrizajes.

Tras realizar su primer vuelo exitoso en julio de 2021, el prototipo de auto volador AirCar de la compañía Klein Vision acaba de recibir la certificación de avión privado de parte de las autoridades de transporte de Eslovaquia. Sus creadores celebraron la homologación, un hito alcanzado tras completar 70 horas de vuelo de prueba y unos 200 despegues y aterrizajes, compatibles con los rigurosos lineamientos de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA).
Con unos 1000 kilos de peso, este prototipo, que combina las prestaciones de un automóvil con una pequeña avioneta, está equipado con un motor BMW de 1,6 litros junto a otro eléctrico de 15 kW, que le permiten despegar de una pista de 300 metros de largo.
“Esta certificación oficial nos permite impulsar el desarrollo de una línea de producción de autos voladores eficientes. Esta decisión confirma nuestra capacidad de cambiar los viajes de media distancia para siempre”, dijo Stefan Klein, piloto de pruebas y máximo responsable del equipo de ocho especialistas que participaron de la creación del AirCar.

A su vez, la compañía destacó las virtudes de su prototipo durante la homologación, donde el AirCar logró lucir su estabilidad y dinámica bajo la modalidad aérea. Este vehículo híbrido cuenta con una autonomía de vuelo de unos 1000 kilómetros a una altura de 2500 metros.
Es un vehículo de dos pasajeros de diseño eslovaco con cuatro ruedas, una hélice de empuje, alas retráctiles estilo navaja y una cola telescópica. La transformación automática del coche en avión, que se activa con un solo botón, solo requiere de dos minutos y quince segundos, según el fabricante.

En el aire, el AirCar puede alcanzar una velocidad de crucero de 190 kilómetros por hora y puede transportar a dos personas con un peso combinado de hasta 200 kilos. A diferencia de otros prototipos de autos voladores, el modelo desarrollado por Klein Vision no despega de forma vertical, y requiere el uso de una pista de un aeropuerto.
Klein Vision, fundada por Stefan Klein, dijo que el prototipo tuvo una inversión de “menos de 2 millones de euros” (unos US$2,4 millones). Anton Rajac, asesor e inversor de Klein Vision, dijo que si la compañía pudiera atraer incluso un pequeño porcentaje de las ventas globales de aerolíneas o taxis, tendría un gran éxito.
Sin embargo, aún no se ha anunciado el precio exacto de la versión para el cliente.
“Hay alrededor de 40.000 pedidos de aviones solamente en Estados Unidos”, señaló y agregó: “Y si conseguimos cambiar el avión por el autor volador en un 5% de ellos, tenemos un mercado enorme”.
«AirCar ya no es solo una prueba de concepto», dijo Anton Zajac, cofundador de la compañía en un comunicado de prensa. «Ha convertido la ciencia ficción en una realidad».
Klein Vision planea desarrollar modelos de tres y cuatro asientos del auto volador, así como versiones bimotores y anfibias, según su sitio web.
Un número creciente de empresas está explorando el potencial de los vehículos voladores a pesar de los obstáculos que incluyen la seguridad y la confiabilidad. Los vehículos voladores tendrían que operar en espacios aéreos abarrotados, cerca de pequeños drones y aviones tradicionales, y también necesitarían un marco regulatorio, lo que podría llevar años.