El gobierno se enfoca en blindar el país de la peligrosa cepa de BrasilEl decreto que elabora la Casa Rosada exigirá que quienes vengan del exterior se paguen un PCR apenas lleguen al país.
Todo indica que el gobierno seguirá el consejo de los especialistas, anticipado este lunes por LPO: concentrarse en blindar las fronteras y restringir al máximo los vuelos con Brasil, origen de la peligrosa cepa P1 de Manaos, más contagiosa y letal que la original de China.
Se analiza además obligar a todos los que regresen del exterior a hacerse un PCR apenas aterrizados, que deberán pagar de su bolsillo. Todo indica que el Gobierno abandonó una idea que además de innumerables problemas logísticos avanzaba fuerte sobre las libertades individuales: Obligar a todos los que regresen del exterior a hacer una cuarentena en hoteles de la Ciudad de Buenos Aires, aunque tengan PCR negativo y no presenten síntomas.
LPO reveló que apenas un puñado de países en el mundo llevan adelante una medida tan extrema y sólo en casos especiales.
Fuentes al tanto de las discuciones confirmaron a LPO que además no hay logística para confinar de manera forzosa en hoteles a los más de 30 mil argentinos que están en el exterior. Mientras que los epidemiólogos como anticipó ayer este medio, recomendaban centrarse en asilarse de Brasil el riesgo más real que enfrenta la Argentina por la cercanía y la intensidad del intercambio de personas.
La otra cepa peligrosa proviene del Reino Unido pero hace meses que no hay vínculo con la isla.
Los ejes de la nueva normativa que busca restringir los viajes al exterior se trabajaron en la Casa Rosada en reuniones coordinadas por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.